martes, 3 de marzo de 2009

Las élites artísticas


En la facultad tuve dos años de una asignatura llamada ‘Estética’ que se suponía nos iba a enseñar los entresijos de las manifestaciones artísticas. Fue una pérdida de tiempo. Como 3 de los 5 años de mi licenciatura, por lo menos. De entrada ninguno de los profesores tuvo la decencia de admitir que no hay manera de definir el arte. A cambio, nos dieron varios centenares de folios de definiciones.

No voy a ir de listo. Yo tampoco tengo una definición de lo que es el arte. Sí tengo claro lo que no es arte. Muchas artes plásticas actuales viven en un terreno de ‘hay que escandalizar como sea para salir en los periódicos’, otras han creado un circuito comercial en el que las obras de los artistas pasan directamente del caballete al museo, y otros viven del cuento puro y duro.

En París se ha inaugurado una exposición en cuyas salas no hay nada. ‘Tributo al vacío’, lo llaman. Espero que cobren por entrar, ya que en ese caso será la perfecta alegoría de lo que el arte elitista ha conseguido crear: Una gigantesca tomadura de pelo.