En 1998 hice un máster en la complutense. Parte de sus actividades incluían un viaje a Francia. En París visité la Shakespeare and Company, un lugar mítico para los amantes de la literatura. Me pareció una falta de respeto visitar el sitio y no comprar nada, así que decidí llevarme un libro. Lamentablemente desconocía muchos de los títulos (creo recordar que la mayoría de los libros allí estaban en inglés), así que fue difícil escoger uno. Entonces encontré Under the volcano, de Malcolm Lowry. No sé dónde había leído que era un clásico de las letras inglesas. Me pareció apropiado, y lo compré.
Tardé un par de años en intentar leerlo, y cuando lo hice traté de traducir palabra por palabra. No pasé de la segunda página. Y desde entonces el libro me fue acompañando de casa de alquiler en casa de alquiler, pasando por Barcelona y de vuelta a Córdoba, como uno de esos propósitos de año nuevo que siempre prometes hacer pero nunca cumples.
Pues bien, aprovechando que ahora tengo tiempo me he lanzado y me he obligado a leerlo. Me ha costado bastante, la verdad. No solo está en un inglés bastante literario, sino que los diálogos son escasos. Vamos, que es un ladrillo. Es uno de esos libros tan típicos del siglo pasado en que la forma importa más que el contenido y la verdad, no me sorprendería que pasados unos años en lugar de un clásico lo etiqueten como uno de esos libros que envejecen mal. Yo al menos no lo recomiendo.
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